Agosto de 2016 en Venezuela, Dagne se encontraban en la Goajira por las entrañas del estado Zulia.
Tierra árida, sol inclemente, brisa triste. Fotografiaba a cinco hermanos, que antes eran siete. El hambre les arrancó la vida a dos de ellos, y esta escena, de niños juguetones y sonrientes abrazando rudimentarias lápidas, se le metió en el corazón como un hueso punzante
El hambre no es de mentira, yo lo vi con mis ojos, lo sentí, lo olí. Me llenó de indignación ver a nuestros pueblos originarios, frente a su Caribe más vasto, morir por la indiferencia de un gobierno que los usa cada vez que puede como bandera de su discurso de visibilidad y reconocimiento. En la Guajira lo visible es el hambre y la desolación.
Dagne lloró sin consuelo. Lo hizo durante y después de su trabajo periodístico. A su regreso a Caracas, dejó de proponer historias, porque ya no quería contarlas, y se desencantó de aquello que había hecho por años. Ese día decidió emigrar.
En abril de ese mismo año Miguel había sido atacado por colectivos (grupos paramilitares) vinculados al gobierno venezolano, en las afueras del Consejo Nacional Electoral. Su error fue saludar a una diputada opositora. Lo golpearon y patearon. Le arrancaron la mochila y le robaron los equipos. Cuando se fueron, Miguel pidió ayuda. La policía, que estaba a unos metros de él durante el ataque, se limitó a advertirle que los atacantes podían regresar, y que era mejor que corriera.
Cuatro meses después, junto a su novia, salía del país.
Nace un emigrante más
Fueron sus amigos Arianna y Gabriel, quienes le hablaron de una posibilidad de vivir por voluntariado, cambiando trabajo por techo y comida. Para Miguel era una válida opción Dagne aún no estaba muy convencida. Registrarse en la plataforma les cambió la vida: Workaway.info, Los anfitriones y aspirantes pagan una cuota de registro, elaboran un perfil, e interactúan hasta concretar un acuerdo.
Ambos tenían algo claro: querían migrar sin tristezas. ¿La vida como voluntarios sería una buena opción? Sonaba atractivo, concedió Dagne, y aceptó bajo la condición de darle una estructura, como la que conservaba en todas las facetas de su vida.
Una nueva forma de llevar la vida
Han sabido transmitir una historia de vivencias y de acontecimientos a través de su cuenta de instagram @emigrante_erratico